Pum! Petardos, cava y esta excelente coca de Sant Joan para purificarnos en la noche del fuego. No diré que no da faena esta receta pero la cantidad de dinero que ahorras y lo rebuena que está hace que merezca totalmente la pena. Adoro los postres que van asociados a las fiestas y son un patrimonio que tenemos que cuidar. Esta coca de Sant Joan la quiero dedicar a dos muy buenos amigos, David y Sandra, con quienes hemos pasado los mejores San Juan de mi vida. Tengo que decir que cuando era jovencita era uno de los días que te dejaban salir por la noche y a mi no me gustaba mucho… Los petardos no me gustan! Una valenciana que no adora los petardos? Hagamos una distinción. Los valencianos hacen de los petardos un arte, una traca es un espectáculo que hay que ver al menos una vez en la vida, pero centenares de personas por la calle, animados por el cava, tirando toda la pirotecnia del mundo exclusivamente a mis pies no mola. Y sí, hay gente que atrae los mosquitos, yo a los amputadores de pies. Y no, no me creo el ombligo del mundo, es que todo el mundo va a por mi!!! Mmmmm… quizás sí que tenga un poquito de manía persecutoria con la pólvora…
INGREDIENTES
- 330 gr de harina
- 80 ml de leche
- 7 gr de levadura de panadero
- 7 gr de sal
- 50 gr de azúcar
- 2 huevos
- 60 gr de mantequilla a temperatura ambiente
- Piñones
Crema pastelera:
- Un huevo y una yema
- 250 ml de leche
- 80 gr de azúcar
- 20 gr de maicena
- 1/4 de palo de canela
- 1/2 tsp de esencia de vainilla
Primero hacemos la crema pastelera. En un cazo calentamos la leche con un trozo pequeño de canela (de verdad, no pongáis un palo entero todo el secreto está en poner un cachito). En un bol batimos el huevo y la yema con el azúcar, la vainilla y la maicena. Cuando la leche haya arrancado a hervir, retiramos la canela, y la echamos en los huevos sin parar de batir para que no cuajen. Devolvemos la mezcla al fuego y seguimos batiendo hasta que espese y hierva. Ponemos la crema en un bol limpio y la tapamos inmediatamente con un film a piel para que no haga crosta.
Ponemos los piñones a remojo en agua fría para que después no se quemen en el horno.
Para hacer el brioche podemos usar la batidora de repostería con el accesorio de gancho o hacerlo a mano. Primero ponemos la harina, la leche, la levadura, la sal, el azúcar y los huevos y hacemos una masa. La dejamos reposar 10 minutos y después vamos integrando la mantequilla en trozos y sin dejar de amasar. Hay que estar un buen rato. Hacemos una bola y la dejamos en un bol tapada con un paño limpio durante un par de horas hasta que duplique su volumen.
Pasado el tiempo le damos forma de coca con un rodillo, la presentamos en la placa de horno y la volvemos a tapar con un paño durante otra media hora. Cuando haya vuelto a levar con un cuchillo hacemos el dibujo del enrejado de rombos con un corte poco profundo. Ponemos la crema pastelera en una manga y por encima de las señales vamos colocando la crema. Esparcimos por encima los piñones escurridos.
Ponemos la coca en la parte más baja del horno. Yo precaliento el horno a 210ºC y cuando pongo la coca lo bajo a 180ºC. La dejamos 30 minutos.
Primer fem la crema pastissera. En una cassola escalfem la llet amb el tros petit de canyella (de debò, no hi poseu un pal sencer tot el secret està en posar un bocí). En un bol batem l’ou i el rovell amb el sucre, la vainilla i la maicena. Quan la llet hagi bullit retirem la canyella i aboquem la llet sense deixar de batre als ous. És important que els ous no quallin. Ho retornem al foc i batem fins que la crema espessi i comenci a bullir. La posem en un bol net i la tapem immediatament amb un film a pell per què no faci crosta.
So, what do you think ?