Si un clafoutis pasara una noche loca con un flan y un puding tendrían le far breton aux pruneaux… Parece ser que este postre es un hit de la repostería francesa y lo podemos encontrar con sabor natural pero el que triumfa es el que lleva ciruelas. No os esperéis un postre refinado, estamos hablando de cocina popular… Por lo que hace a la receta tengo que decir que hay tantas como abuelas bretonas ya que al ser un plato tradicional tiene tantes variantes que te puedes volver loca. Ahora, lo que parece que toda la tercera edad bretona está de acuerdo que lo tenemos que cocer en un molde de tierra, de cerámica y la mayor parte está de acuerdo que le far se remata poniendo lascas de mantequilla con sal por encima como si estuviésemos gratinando canalones. Una cosa importante es que los ingredientes estén a temperatura ambiente i hay gente que pone la leche incluso tebia. Os imagináis que sólo os comento el 10% de trucos que existen. Una opción es dejar en remojo las ciruelas en ron una horita antes pero, en todo caso, borrachas o no, en los ingredientes he duplicado la cantidad de ciruelas porqué son toda la gracia de le far y encuentro que me quedé corta. Para algunas personas que lo han probado le faltaba dulzor, así que si sois golosos poned 50 gr más de azúcar.
INGREDIENTES
- 750 ml de leche entera
- 240 gr de harina
- 190 gr de azúcar
- 4 huevos
- 50 gr de mantequilla salada
- 300 gr de ciruelas
En un bol ponemos los huevos y el azúcar y batimos. Incorporamos la mitad de la harina, añadimos un tercio de la leche en hilo y seguimos batiendo. Ponemos la otra mitad y acabamos de poner la leche. Nos saldrá una masa muy parecida a la de las creps. Engrasamos el molde con mantequilla con sal, echamos la masa, ponemos las ciruelas y rematamos haciendo lascas de mantequilla y las repartimos. Lo ponemos en el horno durante una hora a 160ºC
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